Los almerienses han informado al Ayuntamiento de un total de 3.633 incidencias relacionadas con suciedad en la ciudad a través de la aplicación Almería ciudad, según los datos facilitados al PSOE en la última Comisión de Sugerencias y Reclamaciones celebrada recientemente donde se han analizado los datos entre el 1 de julio y el 5 de diciembre pasados.
Para la concejala socialista, Fátima Herrera, “es una cantidad de quejas desproporcionada si tenemos en cuenta que el Ayuntamiento paga al año más de 27 millones de euros a las dos empresas, por la limpieza y la recogida de la basura, y se supone que la ciudad debe estar limpia y los contenedores de basura en perfecto estado”.
Herrera ha vuelto a criticar “la dejadez y la incapacidad del PP para acabar con la situación de suciedad endémica que sufre Almería y prueba de ello son los datos que arroja la propia aplicación del Ayuntamiento sobre las quejas de los almerienses”.
En cinco meses hay más de 600 reclamaciones por manchas en las aceras, más de 550 por acumulación de suciedad y cerca de 370 por excrementos de animales. En el caso de la recogida de la basura, de las 1.718 incidencias, un total de 1.137 se refieren al estado de los contenedores (más del 66 por ciento) y 374, un 21 por ciento, por el entorno sucio.
“Debería causar sonrojo a la alcaldesa y al resto de su equipo que después de pagar cantidades ingentes de dinero a las empresas concesionarias los almerienses tengan que informarles de todas esas situaciones de suciedad que recoge la aplicación”, considera la concejala socialista, quien se ha mostrado convencida de que “ese número de quejas sería aún mayor si todos los almerienses tuvieran instalada la aplicación”.
Fátima Herrera ha recordado la postura del PSOE sobre la gestión de estos servicios esenciales, que ha puesto de manifiesto en numerosos plenos. De hecho, durante la elaboración del presupuesto municipal de 2025 propuso a la alcaldesa valorar técnicamente una gestión directa del Ayuntamiento para asegurar un control más efectivo sobre la calidad de esos servicios y una mejor supervisión, o bien explorar un modelo de gestión mixta, manteniendo un control público estricto.
“Nada de esto ha sido aceptado nunca por el equipo de Gobierno “, ha enfatizado la concejala socialista, a pesar de que “ahora sería el momento perfecto para esa reflexión puesto que finaliza el contrato con la actual empresa”, añade. “El PP insiste en dejar la ciudad en manos de grandes empresas que no controla ni supervisa, como está más que demostrado, por los datos y por lo que ven y sufren los almerienses en sus barrios cada día”, ha zanjado la concejala socialista.
