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Durante la mañana del pasado 28 de enero, tuvo lugar el último pleno municipal en el ayuntamiento de Huércal de Almería. Según los concejales del grupo municipal de IU Huércal de Almería fue un “pleno especialmente controvertido, en el que hubo muchos asuntos importantes que tratar, en los que destacó la falta de previsión y la desorganización del equipo de gobierno”. El pleno contó con más de 12 puntos del día y muchas preguntas. Pero según los concejales del municipio huercaleño, los temas más importantes fueron los siguientes.
“Por un lado nos encontramos con el empecinamiento del alcalde en hacer lo blanco, negro, y viceversa, respecto al convenio entre el ayuntamiento y COAAL (Colegio Oficial de Arquitectos de Almería).
Este convenio, tal y como expresó el informe de secretaría, había sido firmado antes de ser conocido y aprobado por el pleno municipal y contenía una cláusula errónea ya que se cedían al colegio competencias exclusivas e intransferibles de los funcionarios públicos habilitados para realizar los visados de obras.
Esta irregularidad se debió, únicamente, a la impaciencia de un alcalde que no sabe planificar nada. Pero, a pesar de los informes de secretaría y de la petición de la oposición, se negaba a retirar el punto del orden del día. Intentó que se aprobara pretendiendo saltarse el procedimiento marcado en el R.O.F. sobre la aprobación de puntos y presentación de los mismos. Además se empeñó en que se aprobara un convenio del que no estábamos informados por encima del que ya había firmado sin el aval del pleno. Así, incurría en varias irregularidades en un solo punto, lo que es un nuevo record de incompetencia para el equipo de gobierno. Tras las aclaraciones del secretario municipal, no le quedó más remedio que retirar el punto, no sin resistirse. Pero además, la alcaldía reconoció una deuda del ayuntamiento que ascendía a 62.799€ proveniente de 106 facturas del año 2015, mientras que la morosidad en Huércal había ascendido, lo que nos hace pensar que lo ha hecho por los impagos del ayuntamiento.
Ahora, esa deuda debe computarse al ejercicio de 2016, cuyo presupuesto está en fase de alegaciones y no está aprobado definitivamente. Nos abstuvimos en este punto porque queremos que la gente cobre lo que se le debe, pero no íbamos a ratificar el mal hacer de un ayuntamiento que no sabe prever absolutamente nada.
No obstante, por si esto fuese poco, se nos presentó un reconocimiento de deuda con cargo al patrimonio municipal de suelo que asciende a 105.500€ y que corresponde a obras con expediente de 2014 y que se realizaron de cara a las elecciones municipales, sin haber sido pagadas aún. Esto no sólo demuestra que las cuentas presentadas a los ciudadanos y ciudadanas no son ciertas, sino que el pleno extraordinario para aprobar los presupuestos de este año fue una farsa. Puede que en 2018 nos enteremos de cuáles han sido los presupuestos reales de 2016. Pero no nos hacemos ilusiones, el equipo de gobierno todavía puede sorprendernos con aún más oscurantismo y aún más desorganización”, explicaba el portavoz del grupo municipal, Emiliano Domene.
“No se puede responsabilizar de la incompetencia del equipo de gobierno a los demás, como pretende el señor alcalde. Ya es hora de que asuma sus responsabilidades, declaraba la coordinadora local, María Jesús Amate.
“Tuvimos que recordarle al alcalde todas las preguntas que no ha contestado y la documentación que no nos ha proporcionado a lo largo de los plenos que se han celebrado en esta legislatura. Pero el señor Torres es incapaz de reconocer sus fallos. Todo un ejercicio de irresponsabilidad, de improvisación y una evidente falta de organización, eso es lo que ha sido este pleno. Por ello pedimos al señor alcalde, Ismael Torres Miras, que, de una vez, se centre y deje de improvisar, asumiendo sus funciones y la seriedad del cargo que ocupa "”, finalizó Domene.
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