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Las Plataformas arriba referidas, por primera y única vez, vamos a romper la norma de no responder a los ataques y agresiones, vengan de donde vengan.
Durante más de un año venimos soportando calladamente injustificables ataques de una PAH de la capital, en la que se nos acusa de falsarios y de estafar a los afectados, ya que, según ellos, son la única “PAH oficial”. Con el formato de denuncias a la opinión pública, “alertan” a los afectados tratando de obstaculizar nuestra labor en numerosas ocasiones, haciendo, de paso, el juego a la Banca.
Partimos de que la realidad es que la PAH no es una marca registrada y que se estima en más de un millar de PAHs y Stop Desahucios las formadas en toda España, la mayoría no encuadradas en la “PAH oficial”. Y es también una realidad que tales ataques no han tenido éxito. Nuestro crecimiento es imparable y próximamente nos extenderemos a Níjar. También mantenemos alianzas estratégicas con otras PAHs y movimientos por la vivienda en todo el Estado.
Sin embargo, si han conseguido obstaculizar nuestro acceso a locales, pues tras muchas gestiones, sin resultado entre asociaciones de vecinos, ONGs, etc. hemos aceptado el ofrecimiento de Izquierda Unida de utilizar sus sedes para nuestras asambleas semanales. Algo que agradecemos.
De forma torticera, este hecho les sirve para lanzar otra nueva insidia: no respetamos el principio fundacional de la PAH: ser apartidista y asindical, es decir, no comprometidos con ninguna fuerza política ni sindical. Aunque, en muchas ocasiones se colabore con esas fuerzas, como sucede con las Marchas de la Dignidad, en cuyo órgano de Coordinación participamos todos.
En la mejor tradición, algunos confunden intencionadamente “apartidista” con “apolítico”. Pero no hay nada más político que una Plataforma o movimiento por la vivienda. El apoliticismo lleva a que otros hagan la política por ti y aprueben leyes, como la hipotecaria, contraria a la ciudadanía e, incluso, a los principios legales de la Unión Europea.
Primero, porque más allá de las soluciones transitorias y temporales que conseguimos los afectados, batallamos para que se cambie la legislación, actualmente a favor de la banca, y que la ley garantice el Derecho Humano a la vivienda. Y para ello queremos influir, reunirnos y presentar propuestas a Izquierda Unida, a Equo, a Podemos, a la CGT y al SAT, a la candidaturas ciudadanas, al resto de mareas y a todos aquellos que dicen defender el derecho a la vivienda. Incluso nos gustaría influir en el PSOE, C´S y en el PP, aunque su relación de servidores de la Banca, lo hace imposible.
Y en segundo lugar, bien lejos del asistencialismo, pretendemos empoderar a los afectados, queremos que aprendan las posibles soluciones de su problema, a pedir asistencia jurídica gratuita, a exigir hojas de reclamaciones, a que se unan a otros y vean las ventajas de la lucha colectiva, en definitiva, a tomar las riendas de su propio destino y dejen de ser ciudadanos pasivos a los que se les puede arrebatar derechos sin resistencia.
Por tanto, rechazamos el apoliticismo que siempre es asistencialista y que perpetúa la injusticia y el statu quo favorable a la banca. Pero proclamamos bien alto que sí somos apartidistas. Ni estamos integrados ni subordinados a ningún partido político, sindicato u candidatura electoral. Ni a Izquierda Unida ni a nadie.
SOMOS totalmente INDEPENDIENTES, elegimos nuestras estrategias y tomamos nuestras propias decisiones en las asambleas semanales, que son decisorias y horizontales. Y somos un movimiento reivindicativo que, ante el desamparo legislativo, presionamos a los bancos saliendo continuamente a la calle, como ocurrirá el próximo Martes, día 28, a las 10:00 h. en que iniciaremos nuestra protesta contra el BMN, junto al Celia Viñas para continuar después por diversas entidades en el Paseo de Almería
Volvemos a insistir: no vamos a responder a más provocaciones e insidias provocadas por intereses oscuros. No nos lo podemos permitir pues todas nuestras energías las dedicamos a atender y defender los hogares de más de tres centenares de afectados y a reivindicar el cumplimiento real y efectivo del derecho constitucional a la vivienda. No malgastamos nuestro escaso tiempo en politiqueos, en desprestigiar a otros y torpedear la lucha por la vivienda bajo la excusa de “guardar las esencias”. Quizás por eso, seamos tantos....
A 27 de Julio de 2015
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