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El Encuentro del Cristo Resucitado ha puesto hoy Domingo de Resurrección punto y final a la Semana Santa de Gádor, que culmina con gran brillantez su Semana de Pasión.
Un año más el ansiado Encuentro con el Resucitado, que tiene lugar en la Plaza de la Constitución de la villa gadorense, ha estado precedido por la costumbre de que el “Ángel” encarnado por una niña, pase sobre los cuerpos tendidos en el suelo de los judíos en señal de victoria sobre quienes han dado muerte a Jesús, simbolizando a través de la Resurrección el triunfo de la vida sobre la muerte.
Esta tradición es sin duda una de las escenas más peculiares de Semana Santa gadorense y una de sus principales señas de identidad, respecto a la celebración del Domingo de Resurrección en otras localidades de la provincia.
Este Encuentro del Resucitado han intervenido los Amigos del Resucitado, la Cofradía de los Judíos y la Centuria Romana, que un año más han contribuido a dar mayor realce, colorido y espectacularidad a los desfiles procesionales de esta Semana Santa en Gádor.
Durante el Encuentro se ha procesionado la imagen del Resucitado, que ha estado acompañada por la de San Juan Evangelista, la Virgen de los Dolores y por el Santo Sepulcro vacío, con el que se simboliza la Resurrección de Jesús.
La villa de Gádor culmina así su Semana de Pasión. Una Semana Santa que cada año adquiere mayor realce y esplendor y en la que la fe de los gadorenses se hace sentimiento, echándose a la calle para vivir con intensidad los desfiles procesionales y contemplar el transcurrir de las imágenes de las distintas hermandades y cofradías.
Oración silenciosa, aroma a incienso, sonido de tambores y cornetas, silencio de penitencia, tronos y pasos de Semana Santa, que evocan a los gadorenses la pasión, muerte y resurrección de Jesucristo.
La Semana Santa de Gádor 2015 se abría con la tradicional presentación del cartel anunciador del que es autor Joaquín Berenguel Herrada y que representa la bella imagen de la Virgen de los Dolores; la lectura del solemne Pregón, a cargo de la gadorense, Dolores Almansa Almansa, y el concierto de marchas procesionales de la Asociación Musical de Gádor.
Como antesala de los desfiles procesionales, la Representación Viviente de la Pasión de Cristo, uno de los actos más emblemáticos de la Semana Santa gadorenses, en la que los hijos de la villa recrean los últimos momentos de la vida de Jesucristo y que un año más han seguido miles de personas.
Y por fin, el Domingo de Ramos, bendición de las palmas y la tradicional procesión de “La Borriquita”, de la Hermandad de la Entrada Triunfal de Jesús en Jerusalén, abría los desfiles procesionales de la Semana de Pasión en la Villa de Gádor. Una procesión, que tiene un especial significado en la localidad, por el elevado número de niños, que participan en ella y que despierta entre los gadorenses gran simpatía y cariño.
El Lunes Santo, fue momento de recibir el perdón de Dios por medio de la celebración comunitaria del sacramento de la Penitencia. El Martes Santo, se reanudaban los desfiles procesionales de las distintas hermandades y cofradía, que tomaban nuevamente las calles de la villa de Gádor para procesionar sus imágenes titulares. La Hermandad de La Redención llevó a cabo con gran recogimiento el Penitencial Viacrucis de Silencio. El Miércoles Santo, el Viacrucis de la Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno y Santo Sudario, que recorrió las distintas estaciones de penitencia.
La Semana de Pasión llegaba a su punto más álgido el Jueves y Viernes Santo. El Jueves Santo tuvo lugar la procesión del Encuentro y, tras la solemne vigilia de adoración nocturna, la Cofradía del Santísimo Cristo del Perdón y San Juan Evangelista llevaba a cabo la procesión del Calvario.
El Viernes Santo, los gadorenses recorrían en Santo Viacrucis las catorce estaciones de penitencia. Luego los santos oficios de la pasión del Señor dieron paso al tradicional Desenclavamiento, al que sigue la procesión del Santo Entierro del Redentor y la procesión de la Soledad de la Santísima Virgen de la Cofradía del Santo Sepulcro, Virgen de los Dolores y Prendimiento. El Sábado Santo, Jesucristo yace en el sepulcro y los gadorenses celebran la Vigilia Pascual.
Y finalmente este Domingo de Resurrección, la procesión del Encuentro de Cristo Resucitado, pone el broche final a la Semana Santa gadorense, que queda en el corazón y en el recuerdo de todos los gadorenses, que ya anhelan con volver a vivir el próximo año su Semana de Pasión.
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