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El Ayuntamiento trabaja ya en varias medidas que se acometerán en distintos puntos del municipio como Ejido norte, plaza Manolo Escobar, Balerma, Almerimar y Las Norias, con el objetivo de evitar la entrada de agua a los núcleos de población, así como que se sobrecarguen algunas zonas puntuales en el entorno agrario
Desde el viernes siguen activados todos los dispositivos en las zonas afectadas por la tromba de agua, consistiendo principalmente los trabajos en la limpieza de barro y arrastres, baldeo, señalizaciones y refuerzo de bacheos en las zonas más perjudicadas
El alcalde de El Ejido, Francisco Góngora, ha mantenido hoy una reunión de coordinación con las áreas de Obras Públicas, Mantenimiento y Servicios, de Agricultura y Medio Ambiente, así como con la empresa pública de Desarrollo Urbano de El Ejido (DUE), con el objetivo de analizar todas las actuaciones que se están acometiendo desde el pasado viernes para dar solución a las incidencias registradas tras la tromba de agua que en algunos puntos del municipio llegó a dejar hasta 36 litros por metro cuadrado.
Góngora ha explicado que continúan activados todos los dispositivos, en el que están trabajando gran número de operarios, incluidas las personas de los planes de empleo, de manera que se está actuando para ir limpiando todas las escorrentías, además de reforzar toda la maquinaria para que en esta semana se queden todos los caminos limpios de arrastres.
“Se está trabajando intensamente para recobrar la normalidad en el más breve plazo de tiempo posible en las zonas con más incidencias por la lluvia, señalizando las zonas afectadas, achicando agua, retirando todos los arrastres, intensificando el bacheo y limpiando las zonas con más barro, especialmente en Balerma, pero además, también estamos ya planteando medidas para preparar al municipio frente a futuras lluvias, para minimizar al máximo el riesgo de que puedan volver a producirse situaciones similares”, ha puntualizado.
De esta forma, Góngora ha avanzado que se está trabajando ya en una batería de medidas “algunas con carácter inmediato y otras a medio plazo para poder acometer en los próximos meses actuaciones muy necesarias que den solución a estos problemas que se originan cada vez que llueve con intensidad, sobre todo en los núcleos, que en algunos casos están muy desprotegidos ante avenidas de estas características”.
En el caso de Balerma en particular, los trabajos consistirán en desviar hacia las zonas de levante y poniente del núcleo los cauces y ramblizos que desembocan en la Puerta del Sol, para lo cual ya se está trabajando en una solución técnica que contempla, incluso, la construcción de una balsa de tormentas; algo que también se está planteando en Almerimar.
En este sentido, el alcalde ha anunciado que “estamos totalmente enfrascados en la redacción de un proyecto de desarrollo estratégico del municipio para poder acceder a las subvenciones del marco comunitario del periodo 2015-2020 en las que pensamos incluir ambas actuaciones”.
Asimismo, en Balerma, se procederá también de inmediato a rehacer el aliviadero que hay en la Puerta del Sol, estudiando la solución técnica más adecuada de manera que se evite de forma más efectiva que el agua desemboque en el centro urbano.
Por otra parte, otro de los proyectos que se acometerán en los próximos meses de cara al verano es una importante actuación para mejorar los pluviales en Ejido norte, en la zona de la avenida Príncipes de España, donde se recoge también mucha agua procedente de la falda de la Sierra de Gádor. “Esta actuación estaba previsto que comenzara coincidiendo con las vacaciones de navidad en los colegios de esa zona, para evitar molestias, sin embargo se tuvo que retrasar porque a petición de la Junta de Andalucía hubo que hacer un modificado del proyecto; en junio ya estaremos en condiciones de comenzar con esta importante obra de pluviales que evitará en gran medida que todos los ramblizos que cruzan por esa zona vayan a parar hasta el centro urbano de El Ejido”.
Una actuación que, unida a la prevista también a la altura de la plaza Manolo Escobar evitará que las zonas del núcleo urbano de El Ejido se aneguen. “En definitiva vamos a anillar toda la zona norte de El Ejido para evitar de forma efectiva que no entre el agua de fuera del núcleo de población en las zonas más céntricas”, ha subrayado el primer edil.
De igual modo, también hay una actuación prevista en el núcleo de Las Norias, donde puntualmente también se forman bolsas de agua junto al colegio Mirasierra, para encauzar los sobrantes hasta la Balsa del Sapo, lo que supondrá un alivio muy importante para esta zona.
Campaña recogida de agua en las explotaciones agrarias
Además de las actuaciones previstas en Balerma, Almerimar, Ejido norte, plaza de Manolo Escobar y Las Norias, desde el Consistorio se va a intensificar en las próximas semanas una campaña dirigida a los agricultores para que, tal y como contempla el Plan General, se recoja el agua a través de pozos filtros, “evitando así que el agua sobrante de toda la superficie impermeabilizada de los invernaderos, puesto que esos terrenos no pueden absorber por el plástico, vaya a parar al final a los núcleos de población, aliviando también la presión entre las fincas inferiores y superiores”. “Es un aspecto muy importante, porque si tenemos más de 13.000 hectáreas que están impermeabilizando gran parte de nuestra superficie rústica, pues evidentemente al final eso hace que los caminos y las calles recojan más agua de lo normal”, subraya Góngora.
Ramblas
Por otra parte, desde el Consistorio se ha vuelto a insistir en la necesidad de que la Junta de Andalucía, con plenas competencias en la limpieza de las ramblas, deje de tener una actitud tan pasiva sobre esta obligación, ya que esta dejación de funciones está incrementando de forma muy significativa el riesgo de inundaciones en los núcleos ante la obstrucción de estos cauces naturales de escorrentías.
“Lo hemos dicho por activa y por pasiva, lo hemos planteado en todas las reuniones mantenidas con Consejeros, Delegados, a través de mociones en los plenos, y la Junta sigue teniendo una actitud muy pasiva al respecto”.
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